El valor del Árbol para los Celtas y para Tí

Robledal de Orgi, Valle de la Ultzama

En la actualidad el bosque de la Península Ibérica se encuentra en peligro principalmente por  los incendios provocados, la tala sin repoblación y la caza furtiva. La vegetación era fundamentalmente encinar y robledal al noroeste, coníferas (pinos) en el centro y este. Y hay árboles en peligro de extinción. Todos los bosques mediterráneos se encuentran en estado crítico  tanto su flora como su fauna. El desequilibrio del bosque, es decir, de lo que era nuestro hábitat, está alterando los microclimas, y como todo está unido y compartido por el aire y por la tierra, esto desemboca en problemas mayores a nivel mundial. Por poner un ejemplo, las riadas que se llevan por delante poblados, vidas humanas y animales, en zonas del mundo donde antes había bosque y ahora están taladas, cuando llega la lluvia y se inunda el cauce del río, ya no existe la vegetación que lo contenía. Otro ejemplo que nos afecta es la cantidad de polen de gramíneas que saturan el aire debido a la ausencia forestal.

Escuela infantil Adela Abrines (abril de 2013)
¿Qué concepto tienes del árbol? Cuando acompañaba a Mohammad Tajeran a los colegios de Madrid, aprendí a la vez que esos niños, fascinados ante ese aventurero amigo de los árboles, que cada árbol es la casa de insectos, pájaros y  sus nidos, animales y sus crías, y que el suelo que hay a su alrededor a la vista y bajo tierra, es  sustento de vida para más flora y fauna. Mohammad Tajeran viaja por el mundo en bicicleta plantando árboles con los niños de manera altruista, www.weneedtrees.com. En su breve estancia en Madrid, unas dos semanas, visitamos siete colegios, abrimos debate en el auditorio de un instituto, y plantamos un árbol frutal en cada uno. (Si estás interesa@ en difundir el valor del árbol, si deseas que hagamos un taller gratuito en algún colegio, escribe a glorialdea@hotmail.com)

No cabe duda que tenemos que sustituir cada árbol talado, además de mantener los que quedan en pie.

Los celtas plantaban un árbol al nacer un bebé, era cuidado y adornado en fiestas. Bajo la ventana de mi madre (en el jardincito de la vecindad) hay un gigantesco eucaliptus que mi padre plantó, traído pequeñito de su Galicia natal. Si el niño moría de pequeñito, le enterraban a su pie. Yo he plantado uno por cada hija y los cuidamos, tres grandes ficus. Cuando mi hermana y yo estrenamos casa mi madre nos dio un árbol a cada una. Este eco del pasado pervive, es símbolo de abundancia.

Los Druidas reconocían los valores de los árboles, eran el sustento de la fauna que nos sirve de alimento, procuraban calor, alimento y cobijo a las aves, los animales y a sus crías. A las personas nos dan sombra, oxígeno para seguir respirando, frutos, refugio ante el frío y la lluvia, material para los hogares, usos medicinales, belleza paisajística. Pero también esa belleza y ese equilibrio tan variopinto conceden a nuestros sentidos relax, armonía, sonido, fuerza e inspiración.

 La Naturaleza era más valorada y protegida que en la cultura que les precedió y el no aprecio por la Naturaleza durante siglos ha desembocado en el peligro de extinción de los ecosistemas, etc. Para los Druidas la Naturaleza contenía el conocimiento, observándola y sintiéndola íbamos descubriendo el Todo. Y porque en ella está todo, no se podía escribir. Pero si tenían un leguaje simbólico a través de nudos y hojas y de caracteres rúnicos. Nos dejaron símbolos, recetas medicinales, cuentos, leyendas, folclore, lugares telúricos. Y gracias a los historiadores griegos, romanos y los monjes medievales, hay mucha literatura histórica, y también novelística sobre esta cultura imborrable. Muchas cosas de hoy también son de ayer, eternas. La simbología es comprensible para todos, incluso puede llegar a contener más de un solo significado (a descifrar). Esta forma de expresión es casi un lenguaje universal. Es una abstracción inspirada en la Naturaleza que nos rodea.

Cada árbol tiene su aura o campo energético, como las personas, los animales y las plantas. ¡Pero el del árbol es el más grande! Abrazar a un árbol por unos minutos no tiene parangón.

Observando la estructura del árbol: enraizamiento, crecimiento recto cubierto de capas de sabiduría, y expansión hacia el cielo, se muestran como ejemplo a seguir de nobleza, rectitud, templanza, fortaleza, belleza, etc. Simbólicamente hablando, sus raíces están en contacto con  el mundo subterráneo, su tronco con la sabiduría del mundo terrestre, y su copa con el cielo;  son la esencia del mundo, las columnas del cielo, la conexión entre la tierra y el cielo, la diosa y el dios. Nacen de la olla de la tierra y se expanden en dirección al cielo.

Los Druidas definieron la personalidad de cada árbol. Y elaboraron un sistema para conocer mejor el talante de las personas según el momento de su nacimiento. Así que las personas quedan bajo la influencia y la guía de un árbol: EL HORÓSCOPO CELTA.

Cuidemos de los árboles!